En la ocasión, el mandatario también concurrió a la sexta edición de la Fiesta de la Primavera en el liceo local, recorrió las instalaciones de la planta de Coopar, y recordó que restan 114 días de gobierno y “uno va empezando a cerrar el ciclo”. Ese cierre es material con la inauguración de obras e “intelectual y emocionalmente” con una carga afectiva e intelectual importante. Refirió al cumplimiento de las obras prometidas con un esfuerzo extra “que cambia la realidad”, pero antes es necesario un “involucramiento afectivo intelectual”.
Lacalle Pou marcó la diferencia entre “conformidad y satisfacción”. “La conformidad no debería de ser un término que usen los dirigentes políticos y los gobernantes, porque si queda una persona con un problema, si queda una persona sin trabajo, sin salud, sin educación, el gobernante no puede estar conforme. Puede estar satisfecho con el rumbo”, reflexionó.
Sobre el final de su discurso, el presidente habló de futuro: “quedan 17 días para la elección y nos jugamos mucho”. Lacalle Pou no habló de política partidaria por respeto a la Constitución, según dijo. “En estos 114 días que faltan, vamos a terminar como si fuera el primer día, bueno más arrugado, más viejo”, bromeó y agregó: “con el mismo temple, con las mismas ganas para que el que venga no le pases la posta caminando, vos le tenés que pasar la posta corriendo, tiene que recibir el envión”.
FUENTE: inforocha.
